Hoy habrá otro eclipse, para el revoloteo de la comunidad esotérica,el deleite de los astrónomos y el terror de los asustadizos. Encuentro del hermano Sol y la hermana Luna, es el recuerdo de nuestro pasado incestuoso (no olvidemos que la humanidad empezó con la endogamia), de las malformaciones que provenían de ésos nacimientos y del farol que , cada tanto, ilumina nuestras zonas oscuras. Como dijo Federico García Lorca, en su poema Thamar y Amnón:

“Thamar, bórrame los ojos
con tu fija madrugada.
Mis hilos de sangre tejen
volantes sobre tu falda.
Déjame tranquila, hermano.
Son tus besos en mi espalda
avispas y vientecillos
en doble enjambre de flautas.
Thamar, en tus pechos altos,
hay dos peces que me llaman,
y en la yema de tus dedos
rumor de rosa encerrada”
      Les recuerdo que la historia terminó para la mona, con Amnón teniendo que huir de la ciudad por haber amado a su hermana. Uno de los más bellos poemas de Lorca, ciertamente basado en alguna historia real de la vieja España morisca. No se eclipsen por el miedo. Hoy se unirán en el cielo quienes no pudieron unirse en la tierra. Nada más bello que un eclipse.