Todo pasa. La gripe, la niñez, la inocencia, pasa la comparsa, las estaciones, el cumpleaños, el entusiasmo. Pasan los gobiernos, las modas, los colectivos, el duelo, la juventud, las ansias. Pasa el tiempo, el afilador, el hambre , el sueño, la angustia, la oportunidad , la cartelera, el miedo, la fecha de vencimiento. Pasa el frío, el deseo, el tren, la liquidación, la agonía, el mal que duró casi un siglo y el cuerpo que lo resistió. Pasa el amor al rojo vivo, la uva que se pasa de uva, el pasa en do,  re,  mi,  fa, sol, en la y sí,  por fortuna  y en buena hora, todo pasa.